Una sola célula puede cambiar el universo. A fin de cuentas, es lo mismo.
Últimamente veo el mundo boca abajo. Hago mucho la vela. También aromuka (esto es un inciso para poner las palabras Halfme y centésimo mono en el primer párrafo y que el SEO se quede tranquilo, pero no tengo intención de explicar hoy ninguna de ellas).
Sigo: tengo la teoría de que nuestras glándulas suprarrenales no están hechas para trabajar al límite durante tanto tiempo. Que no se nos da bien tener miedo durante tantos meses, ni tanto cortisol en vena a todas horas, ni desdibujarnos hasta no identificar lo que sentimos cara a cara. Ahora ya podemos ver lo cerradas y desiertas que están las ciudades, todo el mundo va en coche. Ahora podemos entender que si se quemó el Amazonas y Australia y todo eso, nos falte el oxígeno. A Cleve Backster y su teoría de la percepción primaria me refiero. Una célula viva son todas las células vivas así que el daño que causamos, el dolor que infligimos es compartido y lo sentimos; y tanto que lo sentimos. Creo también que nunca había puesto un punto y coma. ¿No os pasa que las conversaciones de la gente que os cruzáis por la calle son las respuestas a las conversaciones que tenéis en la cabeza? Pues algo parecido con los cerdos y las vacas y los árboles y los koalas. Así que basta que una sola célula respire tranquila para que la respiración y la tranquilidad se expandan por todo lo viviente. No sé vosotr@s pero yo creo que si empezamos a crear una realidad amable la amabilidad nos rodeará y en ese momento os cuento lo del centésimo mono y el full-me. Mientras tanto, la extinción.
Id a la naturaleza, a esos lugares telúricos, abrazad y resonad, se notará. Abrazo.
TREMENTINA LUX
*Lo sé, el post es un poco raro, nos estamos transformando.
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